17.11.11

Repetir.



La cuestión va de repetir aunque duela. No puedo parar, estas acaparando mi mente, me siento bipolar por momentos, no se que hacer ni contigo ni conmigo, ya no se si esta bien o esta mal mientras me retuerzo y al instante vuelo. Me siento en un bucle del que el tiempo no me deja escapar, cada vez va a más y da vueltas, no hay salida. La única salida eres tú, y no puedo, se que no puedo salir por ti. Pero quiero hacerlo.


Foto: en Fuerteventura había un sol como el de tu armario.

14.11.11

Y si.


A veces te planteas el porque de las cosas. Otras veces las haces sin más. No me gusta que seas una cosa que hice sin pensar. Ahora veo donde está el cambio, que fuiste para mí, que siento por ti. Y me pregunto: ¿y si voy y lo hago? Y si me das todo lo que tienes, ¿qué hacemos? Estoy dispuesta a entregarme, vale, pero no se el precio.




Foto: dos niños en el Festival Jazz Terrassa.

11.11.11

Juntas.



10 años.




Una década.




Juntas.






He vivido su adolescencia y la mía, sus males y los míos, su felicidad y la mía, y quiero seguir sintiendo que pasamos etapas, dejamos gente atrás, avanzamos, pero seguimos juntas. Pienso en el pasado y casi no hay uno en el que no esté ella, siempre ha estado. 
Y me da igual que no me quiera o que deje de quererme, porque es irremediable, 
es mi Victo.






Foto: Victoria cuando tenía 12 años.

7.11.11

Búsqueda.


Tenía un corazón en la manos, este sangraba pero no se me movía, había dejado de existir por un periodo corto de tiempo, dándole la razón a lo que su mente tanto tiempo llevaba sospechando. El ni si quiera sabía de quien era ese corazón, como había llegado a sus manos. Casi no lo veía. Pero no era lo mismo para ella, que se retorcía buscando dónde estaba el pedazo que le faltaba, mientras el hueco de su pecho se hacía cada vez más grande. Era como buscar un diente de tiburón con el peligro de que si lo encontrabas quizá este te arrancaría el brazo o peor, te mataría. Aun y con todo, ella no se cansaba, insistente recorría las palabras, los gestos y la boca de la gente, contemplaba sus nucas desde lo lejos, esperando una respuesta. Buscaba una señal, una energía que brillara y le derajara entrever, por unos segundos, que su corazón estaba cerca.




Foto: Días de bricolaje en Gràcia.